Luego que la Sala prohibiera al Gobierno poder exigir una prueba PCR negativa a COVID-19 a salvadoreños y extranjeros que quisieran ingresar al país, ya sea vía aérea o terrestre, advirtieron que volverán a cerrar el Aeropuerto si los ingresos influyen en el aumento de casos en el país.
Algunos diputados de la Asamblea Legislativa aseguraron que la medida iba –en algún momento– a violar un derecho Constitucional. René Portillo Cuadra, diputado de ARENA, aseguró que lo que necesitaban era un Decreto Legislativo que autorizara dicha medida sanitaria. El diputado de GANA, Guillermo Gallegos, aseguró que la nulidad de la medida aumenta el riesgo de contagios, “pero que no quedaba opción y que debían acatarla”.
A travez de Twitter el Presidente de la República, Nayib Bukele, advirtió que todas las aerolíneas que deseen aterrizar en el país tendrán que exigirle la prueba negativa PCR, tomada como máximo, 72 horas antes del viaje para que hayan ingresos seguros.
Posteriormente detalló que el requisito no será permanente pero que estará vigente hasta que se logre controlar la curva epidemiológica.
La Sala de lo Constitucional aseguró que exigir una prueba PCR negativa certificada supondría una prohibición de ingreso para los salvadoreños que se encuentran en el exterior, lo que contraria en el Artículo 3 de la Constitución. Además, enfatizó, que no cuenta con un régimen de excepción que habilite la medida aunque sea sanitaria.