Internet ha abierto una infinidad de oportunidades tanto laborales como sociales, sin embargo también ha permitido la entrada de una nueva forma de delitos en la Red. La información más vulnerable son los datos personales, los cuales cedemos constantemente a diferentes empresas pero a menudo resulta complicado saber si la empresa a la que confiamos nuestros datos cumple con la legalidad.
Cada vez que se crea una cuenta ‘online’ es necesario introducir algunos datos personales, por ello la compañía tecnológica española CoRegistros ha recogido una serie de consejos para evitar que nuestros datos sean fruto de ataques.
Toda persona tiene derecho a que sus datos estén protegidos, es decir saber quién tiene tus datos, qué datos necesitan exactamente y sobretodo para qué los van a utilizar.
Pero esto no es lo único, también es importante que expresen de forma clara qué datos van a almacenar, cómo se puede modificarlos e incluso cómo eliminarlos si ya no se quiere que la empresa los tenga. Cualquier empresa que haga uso de buenas prácticas no tendrá ningún inconveniente en facilitar esta información.
Los sorteos en Internet se han convertido en algo muy atractivo, pero hay que tener cuidado y fijarse bien si el sorteo cumple con los requisitos indispensables antes de apuntarse y dar los datos. El más importante es que el sorteo se vaya a realizar ante notario, también hay que comprobar que las bases están inscritas en la web del Consejo General del Notariado.
Otra de las cosas en la que nos tenemos que fijar es que si los datos que nos piden son necesarios. Nunca se debe dar información innecesaria relacionada con la familia o el entorno próximo, como puede ser el nivel de renta, la tarifa telefónica o cuantos televisores tienes en tu casa.
La imagen del cliente siempre debe estar protegida, por lo que para que una compañía pueda publicar una foto o vídeo tiene que tener el consentimiento explícito de esa persona, además se debe indicar la finalidad y dónde se va a publicar.
Los datos de los menores de 14 años se pueden recoger siempre y cuando haya consentimiento previo de la madre, padre o tutor legal, por ello es fácil saber si una empresa es fraudulenta, si al pedir los datos de un menor no pide el consentimiento paterno o trata de ocultar su identidad.
Por último si quieres saber qué hacen de verdad con tus datos, hay que leer la información completa, aunque sea un texto largo y monótono es importante conocer las políticas de privacidad y de ‘cookies’ que tiene la empresa a la que estas confiando tus datos.